«Los jóvenes tenemos mucho que decir y que hacer en este sector»

ELECONOMISTA.ES/OPC

¿Cómo está afectando la crisis a la organización de congresos y eventos?
La actual situación económica está haciendo que disminuya el número de eventos, su duración y su presupuesto. Las instituciones públicas, que eran uno de nuestros principales clientes, han eliminado casi en su totalidad el presupuesto para estas acciones. También, algunas asociaciones y colectivos están ampliando los espacios entre eventos.
¿Qué recetas están aplicando a la caída de la demanda de congresos?
El ingenio, la imaginación y la originalidad a la hora de presentar un proyecto. Ofrecemos eventos más eficientes y de calidad. Por otro lado, las relaciones con los proveedores son más estrechas, intentando apoyarse y conseguir beneficios mutuos garantizando la calidad.

¿Qué persigue una organización como la que preside?
La asociación Jóvenes OPC España persigue demostrar que los jóvenes tenemos mucho que decir y que hacer en este sector, que ni somos meros espectadores ni «pasamos», queremos, podemos y sabemos aportar. Nuestros objetivos principales son la constitución de un foro permanente de participación, facilitar la interrelación y conocimiento mutuo de los jóvenes, investigar nuevas oportunidades de negocio y fomentar la aplicación de nuevas tecnologías y el desarrollo de actividades, como la participación en conferencias y foros de debate o la creación de una bolsa de empleo.

Todavía existe intrusismo en el sector. ¿Cómo se puede acabar con él?
La manera de acabar con el intrusismo es que los profesionales del sector se impliquen al máximo en cada uno de sus eventos, estén en continua actualización y demuestren que para garantizar el éxito de un evento se ha de contar con un especialista, un auténtico profesional. Aquí, la administración podría jugar un papel importante si, como ocurre en algunas comunidades, se pusiera en valor la figura del OPC, se le apoyara y se creara un registro que acogiera a las empresas que cumplieran requisitos como experiencia, profesionalidad, ética, conocimientos, medios técnicos, avales, etc.

¿Y qué papel pueden jugar los jóvenes en la redefinición del sector?
Sin lugar a dudas, un papel fundamental, aportando una visión totalmente diferente con ideas innovadoras, singulares, atrevidas a la vez que seguras. Para ello las nuevas tecnologías suponen una herramienta muy eficaz con la que los jóvenes estamos familiarizados y a la que podemos sacar mucho partido.
¿También la actividad de congresos se puede internacionalizar?
Por supuesto; parece ser que sólo se conocen o son noticiables los casos de empresas o multinacionales extranjeras que organizan eventos en España o abren delegaciones, pero por suerte tenemos cada vez más casos de empresas españolas que son invitadas a concursos internacionales, operan congresos en el extranjero e incluso tienen delegaciones en otros países.
Las nuevas tecnologías han suprimido las fronteras en el intercambio de información. ¿Son una amenaza o una ventaja en la organización de congresos?
Son una ventaja ya que ayudan a que la organización del evento sea más eficaz, con muchas más opciones y con mayor rapidez, a la vez que permiten que lo que funciona en un país, sea fácil y rápidamente exportado al resto. Las fronteras físicas se han eliminado, pero también, y eso es mucho más importante, las fronteras y barreras psicológicas, de pensamiento y culturales.

Los idiomas siempre han sido uno de los grandes ‘handicaps’ para los españoles. ¿Hemos mejorado?
Aun siendo conscientes, según las estadísticas que manejamos, de que el dominio de idiomas no está todavía generalizado en nuestro país, poco a poco nos estamos concienciando cada vez más, sobretodo los jóvenes, de que es algo esencial, ya que te abre muchas puertas y facilita la interrelación con personas de todo el mundo. Y si encima hablamos de un sector como este, creo que es imprescindible ser capaz de comunicarte al menos en inglés, algo que las nuevas generaciones pueden hacer cada día más.

¿Qué papel debe jugar España en la organización de congresos?
Deberíamos convertirnos en un país de referencia en la organización de congresos, ya que tenemos los profesionales, los espacios y las condiciones para serlo. Empresas e instituciones deberíamos unirnos para poder vender no sólo el destino, que es en lo que a veces nos detenemos, sino también nuestra preparación, nuestros medios técnicos y nuestra profesionalidad.